Aunque el tan valorado “cara de gallo” no fue el protagonista de esta temporada estival, lo cierto es que los sucesivos días nublados no impidieron a los zapallarinos y cachaguinos gozar de unas atractivas vacaciones.
Sin duda, el sello que marcó el verano 2004 fue la gran variedad de novedades; el mini mall o el “small” –suspicazmente así apodado por el fallecido Diego José Fontecilla- fue quizás uno de los centros de atención del balneario. Modernas tiendas de diseño, ropa, vinos, entre otras, se complementaron amigablemente con el ya imperdible café de La Esquina.
Justo frente al recién inaugurado centro comercial, y tal vez emulando los locales con más onda de Saint Tropez, el glamoroso “Casablanca”, se trasformó por su parte en el sitio “top”. Sus mesas al aire libre, su galería de arte y exclusivas tiendas de ropa y decoración, albergaron a la crema y nata de la zona y a algunos foráneos que al parecer buscan incorporarse a la socialité zapallarina (matrimonio Menem/Bolocco).

Fuera de los espacios nombrados, La Tartaleta también recibió a los veraneantes que hacían la pausa durante la tarde para disfrutar de buena repostería en su terraza ubicada entre las tiendas de decoración Miró y Chantal Bernsau.
Pero Cachagua no se quedó atrás en primicias. La inauguración del supermercado en la entrada del balneario; todo un suceso. Además del aporte estético en su arquitectura, la variedad y calidad de sus productos tuvo una excelente acogida, sobre todo para abastecer a quienes pasan la temporada completa en la zona.
En gastronomía el restaurante “A Pinch of Pancho”, instalado en el Club Ecuestre, fue una buena alternativa para los que quisieron olvidarse por un rato del mítico Lermitage o del clásico Chiringuito.

Nuevas disciplinas deportivas
Al margen de los ya tradicionales campeonatos de tenis y golf, es un hecho que fue en la playa y en los cerros, y no en el pasto o la arcilla, donde se vivieron los episodios más adrenalínicos y extremos. La irrupción desde las costas californianas del skim-board significó quizás el hito deportivo más notable del verano. Exponentes extranjeros y nacionales se lucieron en el campeonato que a mediados de enero organizó un joven zapallarino.
En tanto el buceo, instaurado ya hace un par de años con la Escuela que imparte la Municipalidad de Zapallar, también cobró fuerza en el muelle del balneario. Otros pocos se entusiasmaron con los kayacs, disfrutando de un paseo por la bahía o corriendo algunas olas.
Voleibol, fútbol, mountainbike y trekking, todas actividades que ofreció el municipio a los jóvenes y niños, nutrieron por cierto la atractiva oferta recreacional.

Un mar de cultura
Ecléctica y diversa fue, por decir lo menos, la programación de eventos culturales. Ello, en parte, gracias a la gestión de la Dirección de Cultura de la Municipalidad. Los conciertos y obras de teatro realizados en el Parque La Paz, así como las exposiciones presentadas en la galería de arte del propio municipio, constituyeron el grueso de la actividad. Lo anterior se combinó con muestras de pintura y fotografía en las galerías del Club Ecuestre, Don Olegario, Casablanca y las de Costa Cachagua y Cantagua.
También -en forma independiente- se realizó con éxito, durante la segunda semana de febrero, el II Festival de Jazz de la comuna en la cancha de pasto del Club Ecuestre.
A todo este escenario se le sumó en la segunda quincena de febrero la tradicional semana zapallarina. En síntesis, panoramas hubo de sobra.
También en forma independiente se realizó con éxito durante la segunda semana de febrero el II Festival de Jazz de la comuna en la cancha de pasto del Club Ecuestre.
A todo este escenario se le sumó en la segunda quincena de febrero la tradicional semana zapallarina. En síntesis. Panoramas hubo de sobra.

Lo negativo
Pero así como destacó lo positivo, también hubo algunos reparos que son importantes de mencionar y considerar a futuro.
Aún cuando muchos vecinos ya cuentan con la conexión al alcantarillado en Zapallar, todavía faltan algunos que lo hagan. Por eso continúan los desagradables olores en ciertos sectores del balneario.
Otro tema que no es menor son los robos en las casas. Aunque no fueron muchos, el hecho es que todavía persisten.
Por otro lado la limpieza de las playas efectuada todas las mañanas con la máquina de la Municipalidad, fue opacada por los veraneantes que no cooperaron mucho con la higiene; colillas de cigarro, latas de bebidas, entre otros escombros, volvieron a deteriorar el paisaje.
En cuanto a destrozos, las nuevas jardineras insertas en espacios de estacionamientos -específicamente en la calle Moisés Chacón- resultaron ser las más dañadas. Las instalaciones en la práctica no dieron buen resultado.
Por último, la notoria publicidad con auspicios sobre actividades culturales en ambos balnearios, es un tema que la Municipalidad deberá abordará con más control.

Permisos de circulación
Nuevamente solicitamos que cooperen con nuestra comuna obteniendo sus
permisos de circulación del año 2004 en Zapallar. Como ustedes saben, a contar del año 2001, sólo percibimos el 3,75% de la recaudación total, lo que nos obliga a captar más permisos para no afectar nuestro presupuesto.
En los últimos años, con su ayuda hemos avanzado en aspectos fundamentales para la comuna. Su aporte nos ha permitido la reconstrucción de establecimientos educacionales en Zapallar, Cachagua y Catapilco e implementar con éxito la jornada escolar completa así como avanzar en la construcción del alcantarillado y plantas de tratamiento en los tres balnearios.
A futuro debemos concluir este proceso; mejorar la calidad de los espacios públicos, mantener la limpieza, así también abordar necesidades en el área social.
Los que tengan su permiso anterior pueden pagar directamente en el Banco de Chile.
Los autos o permisos nuevos deben hacerlo en el propio municipio.
Durante marzo como es tradicional atenderemos a nuestros vecinos también en Santiago.

Inscripciones elecciones municipales
Aquellos vecinos que no estén inscritos en los Registros Electorales de Zapallar, les solicitamos que lo hagan, porque no sólo es un derecho, sino un deber que ustedes influyan a través de su voto eligiendo a las personas más capacitadas para liderar el desarrollo de nuestra querida comuna.
Fechas y horarios: Durante marzo los registros electorales estarán abiertos los primeros siete días hábiles del mes incluyendo el día sábado de 09:00 a 12:00 horas.
Sólo desde el 1 de abril hasta el 2 de julio las juntas electorales estarán abiertas todos los días hábiles del mes, excluyendo domingos y festivos.
Lugares de Inscripción:
Junta Electoral de Zapallar (Moisés Chacón a un costado de la Sede Comunitaria)
Junta Electoral de Catapilco (Calle Balmaceda a un costado de la Escuela Municipal)

Todo empezó en Cachagua ,
en la década del 40
la casa de piedra y
la casa de las Cujas
la hacienda de Los Vicuña
y el Pueblo.
Eso era todo lo que había.

Pero fue en Zapallar donde echó raíces.
Verano tras verano Diego y Calelo eran los
primeros en llegar y los últimos en irse.
La época de oro con las señoritas luna
con los bailables del Gran Hotel
con las golosinas de Evaristo
con la visita de los argentinos
con las familias almorzando en la playa
y con las fotos del Zig Zag.

El sol nos empapaba de alegría y
parecía que la vida era una eterna carcajada.

Su inmenso talento para todo lo situó en la pintura.
No obstante todo lo que escribía era gracioso, ingenioso
siempre acertándole al más minúsculo detalle.
Nada se le pasaba a Diego, todo lo percibía,
era sentimental hasta los huesos.

Entre nosotros fue el primero en realizar
que se podía vivir en Zapallar, y aún más que
era maravilloso vivir en Zapallar. Así fue que
dejó Santiago, que nunca quiso, y se convirtió
en zapallarino permanente.

Sus cuadros adornan la mayoría de las casas de Zapallar,
Él conocía a todos, y todos lo conocían a él.
Crecido entre gente humilde, fue siempre un
fiel amigo del pueblo, como ellos fueron de él.

Los años pasaron y Diego encontró en el volar
como los pájaros una vida nueva; allí en la quietud del espacio y
en el silencio absoluto aprendió a gozar nuevamente y esto pasó a ser
su más grande afición.

Con una memoria increíble se acordaba de anécdotas
de épocas pasadas que brindaba con sabrosa picardía. Sus álbumes de fotos
famosos por ser el reposito de aventuras olvidadas. Su casa, reflejo de su simpleza de alma y de vida.

Sin respeto a nada, de pronto, como una ráfaga de viento, su rostro se paraliza y
aún más le anuncian que no saben bien cual puede ser la causa de esta afrenta.
Sabiamente se refugia en el santuario que él ya conoce y decide escribir sus últimos versos sin interrupciones de hospitales, médicos y enfermeras.

Diego: quedarás como testigo de una época inolvidable, testigo de corazones que sufren sin saber porqué, testigo de todo el amor que nos brindaste y así todos diremos que Zapallar es Diego y Diego es Zapallar.

Nos despedimos Diego,
pero no te olvidamos,
Jamás te olvidaremos.

En las rocas, en el mar, en los cerros, en el pueblo, y en todas partes podemos ver tu rostro; aquel rostro que tanto conocemos y que está grabado en lo más profundo de nuestro ser.

Zapallar te vio nacer,
Zapallar te vio cercer,
Zapallar te vio surgir,
y también ……Zapallar te vio morir.

Luis Emilio Casanueva